Lo resultados de los análisis hechos en el Laboratorio de Ensayos Ambientales del Centro de Estudios Ambientales de Cienfuegos (CEAC) a las muestras del meteorito caído en la zona de Viñales el pasado 1ro. de febrero, permitieron detectar la presencia de 27 elementos en su composición química y minerológica
Los resultados de los análisis hechos en el Laboratorio de Ensayos Ambientales del Centro de Estudios Ambientales de Cienfuegos (CEAC) a las muestras del meteorito caído en la zona de Viñales el pasado 1ro. de febrero, permitieron detectar la presencia de 27 elementos en su composición química y minerológica.Así lo informó el Doctor en Ciencias Efrén Jaimez Salgado, investigador auxiliar y jefe del Departamento de Geología Ambiental, Geofísica y Riesgos del Instituto de Geofísica y Astronomía (IGA), durante una conferencia de prensa efectuada en esa propia entidad, perteneciente al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
Como resaltó el especialista, los de mayor interés por su contenido son en primer lugar el silíceo (22,5 %), hierro (22,3 %), azufre (16,48 %), y magnesio (5,8 %), todos verificados por Espectrometría de Fluorescencia de Rayos x por Dispersión de Energía.
Igualmente se determinó la presencia en valores menores de sodio, aluminio, potasio y calcio, además de otros compuestos metálicos relativamente escasos en nuestro planeta.
De acuerdo con lo manifestado por el doctor Jaimez Salgado, a partir del contenido ya verificado, podría ser un meteorito pétreo o litito, perteneciente al subtipo acondrita, los cuales constituyen alrededor del 7 % de los hallados en la Tierra.
Tomando en cuenta la composición mencionada, todo hace presumir que el objeto cósmico forme parte del grupo específico de meteoritos hed, y dentro de ellos corresponderse con una eucrita. Lo cual hace suponer con cierto nivel de certeza que pudo provenir del asteroide Vesta, el tercero más grande en tamaño del sistema solar y el segundo por su masa, situado a unos 372,5 millones de kilómetros de la Tierra.
Resulta importante subrayar que en la muestra estudiada se confirmó también la presencia de pequeños niveles de radiactividad, por tanto no deben ser utilizados pedazos del meteorito para confeccionar aretes, collares, amuletos y pulseras, asidas de manera permanente al cuerpo.
Hasta el momento han sido encontrados más de cien fragmentos de ese objeto cósmico, que constituye el más notable acontecimiento de su tipo conocido en Cuba y el segundo meteorito visto caer en nuestro país. El anterior ocurrió el 10 de junio de 1994, en Cienfuegos.